Hace tiempo que tengo la sección de Vikingos de ayer y hoy, y quizá por lo obvio de su pertenencia a esta categoría no había añadido a los vikingos propiamente dichos. Moriré por hereje, por no haberlo traído antes al blog, pero hoy tengo el gusto de presentar a: 

Marco Hietala

 

Nacido en 1966 (solo nos llevamos 25 años de nada, pshe) y de origen finlandés, forma parte del grupo de power metal sinfónico Nightwish, como bajista y cantante. Ha convivido con la música desde muy pequeño, tal y como él cuenta en la página web del grupo. Empezó a tocar la guitarra y el bajo a los 12 años, y estudió en el conservatorio Oulunkylä Pop and Jazz Conservatory.

Aparte de Nightwish ha formado parte de otros grupos como Sinergy o Tarot, en la que es vocalista, bajista y compositor (¡olé!). Dentro de Nightwish sustituye al anterior bajista Sami Vänskä, por lo que está con la banda unicamente desde el año 2002. Sin embargo, sus aportaciones al grupo no han sido solo instrumentales. 

En un principio debía acompañar a la por aquel entonces vocalista de Nightwish, Tarja Turunen en algunas canciones, pero poco a poco fue abriéndose paso en el grupo. Actualmente tiene canciones en la que es el vocalista principal, y también canta canciones de otros músicos en los descansos de los conciertos. 

Entre sus grupos favoritos se encuentra Black Sabbath y Judas Priest, y dentro de Nightwish, se queda con la canción the Siren y el disco Once. Ente sus aficiones se encuentran la lectura (destacando El Señor de los Anillos), el cine (siendo su saga favorita la de Star Wars orginal) y los videojuegos. Dice que su peor miedo sería perder la voz... ojalá no llegue a pasar, pues la suya es para mí, una de las mejores voces masculinas de la música contemporánea. Comprobarlo vosotros mismos en este video de su gira End Of An Era, interpretando High Hopes, canción original de Pink Floyd.