Etiquetas

sábado, 28 de agosto de 2010

Sherlock

Creo que no queda nadie en el mundo que no sepa quienes son Sherlock Holmes y su inseparable dr. Watson. Bueno, visto lo visto, y pensando en ciertos individuos no estoy tan segura...
En fin, Sherlock es un clásico, un icono, un personaje internacional conocido hasta en las tierras del sol naciente (como podemos ver en Detective Conan, por poner un ejemplo) y múltiples han sido las series de televisión, las películas, adaptaciones en comic, e incluso novelas basadas en las novelas. Si, es extraño, pero existen. Pensé que después de la adaptación poco fiel y muy comercial del pasado año, el cupo estaría lleno. Pero la BBC ha vuelto a sorprenderme, trayendo una maravillosa pero corta adaptación. Y ahora... 



Sherlock es una adaptación de cómo hubiera sido la historia de Sherlock Holmes y John Watson en nuestros días. El resultado es refrescante, sorprendentemente fiel al original, entrañable y muy entretenido.
Como la BBC es un poco especial, limita la serie a tres capítulos de aproximadamente una hora y media cada uno. En Japón creo que llamarían OVA a este maravilloso producto inglés. Cada capítulo está titulado como uno de los de los libros originales, pero con algunas pequeñas diferencias. Así nos encontramos con A Study in Pink (Estudio en rosa), The Blind Banker (el banquero ciego) y The Great Game (El Gran Juego). El caso es que aunque la duración parezca excesiva son absorbentes y muy amenos, y al llegar al último capítulo te quedas con ganas de más.

Por otro lado, los actores son sobresalientes en su mayoría. Benedict Cumberbatch, que interpreta a Sherlock Holmes, es excepcional. El resultado de su actuación es un individuo de rostro y actitud bastante desagradable que macharías hasta la muerte después de haberle puesto un templo e intentado violarlo.
Martin Freeman interpretada a Watson con una mezcla bien aprovechada del original y del versionado de la película de Guy Ritchie. Sin ser el extremo adulamiento y servicialismo del original, bajo una apariencia de hastío a ratos, vemos a un Watson que admira a Holmes e intenta igualar o por lo menos acercarse a su habilidad. 
El resto del elenco es bastante bueno, no hay ninguna actuación exagerada o desmesurada. 

Otro punto sobresaliente es el apartado gráfico y los efectos. La fotografía es buena y algunos detalles de post-producción hacen las delicias del público. Fiel al mundo en el que vivimos, los teléfonos móviles son habituales, y los mensajes de texto que se mandan o reciben en la serie aparecen como mensajes flotantes, así como algunas indagaciones de Sherlock sobre la marcha. 

En cuanto a la adaptación contemporánea, la veo bastante acertada. Holmes y Watson son compañeros de piso en la mítica 221B de Baker Street. Holmes sigue siendo un brillante genio de una familia acaudalada, y su hermano Mycroft sigue trabajando para el gobierno. Lestrade está ahí, pero junto a él está la sargento Donovan que desprecia a Holmes calificandolo como: freak¡. Watson fue médico de guerra, pero no en la India, sino en Afganistán. Cojea como resultado de una herida de guerra, pero sus heridas son mayormente psicológicas, no físicas. Holmes no fue en pipa, ni tampoco le da al opio: es adicto a los parches de nicotina. 



En resumidas cuentas, recomiendo encarecidamente la visualización de esta mini serie con visos a tener continuación debido al abrupto final y las buenas críticas que recibe en Internet. Pero antes de cerrar esta plataforma de diseminización de ideas y darme al juego desenfrenado, me gustaría señalar la fidelidad de la serie, con un dato que se menciona en el último capítulo. Cito a Wikipedia,  fuente de muchos, para explicar lo que se cuenta la serie con practicamente una fidelidad absoluta:


el doctor Watson decide evaluar las habilidades de Holmes, calificándolas de este modo:
  1. Literatura.— Cero
  2. Filosofía.— Cero.
  3. Astronomía.— Cero.
  4. Política.— Ligeros.
  5. Botánica.— Desiguales. Al corriente sobre la belladona, opio y venenos en general (puede distinguir el lugar de cultivo de la planta, día y tiempo de consumo estudiando una colilla de cigarro). Ignora todo lo referente a los cultivos prácticos y jardinería.
  6. Geología.— Conocimientos prácticos, pero limitados. Distingue de un golpe de vista las clases de tierras. Después de sus paseos por Londres puede debido al color y consistencia definir de que parte de toda la ciudad es cada una de las manchas de barro en su pantalón.
  7. Química.— Conocimientos profundos.
  8. Anatomía.— Exactos, pero no sistemáticos.
  9. Literatura sensacionalista.— Inmensos. Parece conocer con todo detalle los crímenes perpetrados en el siglo XIX.
  10. Música.- Toca bien el violín.
  11. Combate.- Experto boxeador y esgrimista de palo y espada.(Sin embargo, en La aventura de la casa deshabitada, de 1901, Sir Arthur Conan Doyle menciona que Holmes tenía algún conocimiento de Baritsu, refiriéndose al Bartitsu, arte marcial ecléctico enfocado a la defensa personal que fue desarrollado en Inglaterra entre 1898 y 1902).
  12. Leyes.- Tiene conocimientos prácticos de la leyes británicas.6

Finalmente solo me queda agradecer a la Wikipedia que me ha servido para recordar y contrastar algunas cosas, e IMBD, sagrada fuente de conocimientos. Os dejo los enlaces a la ficha de la serie en IMBD y la página oficial de la serie de la BBC.  
Ale, ¡a continuar con la respiración y las reacciones quimico-orgánicas de vuestros cuerpos¡



2 comentarios:

  1. Y no solo la serie es excepcional sino que ha conseguido una segunda temporada duplicando el numero de capitulos de la primera, que aunque 6 no parezcan gran cosa... hay que tener en cuenta lo peculiar de las producciones de la BBC.

    ResponderEliminar
  2. Acabo de verme el ultimo, como se meten con su ignorancia del sistema heliocentrico, habia un momento que pense que iban a sacar a Irene Alder con todas las referencias a Bohemia, es una gran serie para los fans de Sherlock Holmes

    ResponderEliminar